¿Por qué Caín mató a Abel? la verdad es que ésta juventud esta herida, resentida y muy ofendida porque no hubo un hermano o hermana mayor que les defendiera. Nos urge con todo el corazón, que en el nombre de Jesús nos levantemos para alcanzar estos millones de jóvenes, en quienes solo la sangre de Jesucristo puede obrar milagrosamente para transformarlos. Este libro es una alerta, un llamado, un grito de protesta, ¡Basta ya!. Caín no puede seguir matando a Abel. Con la sangre del Cordero los vamos a levantar.